Siempre he sido celoso guardián de mi privacidad, nunca daba un nombre verdadero en ninguna parte y tenía doscientos tipos de correo de diversos pelajes. Esta actitud negativa a revelar mi verdadero yo y el ser tan receloso de dar mis datos, a medida que ha cobrado importancia internet en el mundo y he comprendido como funcionan las cosas en la red, para mi ha dejado de tener sentido. Ahora te llaman para trabajos viendo tu perfil en webs de empleo, viejos amigos te recuerdan y te buscan en redes sociales, etc.

¿Darías el teléfono móvil falso a una chica estupenda que te gusta sólo por tu privacidad?, ¿por si las moscas?, pues lo mismo el correo.

Ya sé que algunos os tirareis de los pelos leyendo esto y defiendo que las empresas deben resguardar los datos personales y no hacer mal uso de ellos, pero por otro lado me parece normal que al final si una empresa te ofrece un servicio que te interesa de forma gratuita la única manera que tienen de hacerlo es mediante publicidad. Los publicistas evidentemente se guían por tus gustos, estrato social, etc. EL PRODUCTO ERES TÚ

Hay mucha gente preocupadísima por su navegación en internet, quieren que sea anónima, no hacerse perfiles en Facebook o Google+ porque quieren privacidad, algunos no utilizan servicios como Calendar, Gmail, Evernote…me entra la risa al verlo. Ya sé que vivimos tiempos en los que será muy fácil clasificar al personal en cuanto a opinión, pero es que las cosas han cambiado mucho y el orden de lo privado y lo público también. En la red no ha habido anonimato jamás, como tampoco tienes anonimato de ninguna clase usando un móvil o un GPS y tampoco tienes anonimato cuando utilizas tu teléfono de casa. Si alguien cree que se va a librar de que hagan de él un perfil tanto las empresas como el gobierno se equivoca bastante, a estas alturas incluso no ser un perfil ya es un perfil.

Lo que vengo a decir es que tiene que haber un equilibrio entre la privacidad que uno quiere, lo que le es útil, y por supuesto, hasta qué punto pueden meter las empresas y gobierno las narices en tu vida. A los paranoicos de la privacidad lamento comunicaros que para el gobierno hace tiempo que no hay Ley que impida meter las narices en vuestras vidas con un juez por medio que se empeñe en hacerlo, por otro lado no me parece tan mal en casos como la pederastia y cualquier otra aberración que haga daño al ser humano, gracias a que no hay anonimato se saca mucha gentuza de la calle.

No os preocupéis tanto de la navegación anónima y empezar a preocuparos más por las Leyes que se aprueban que SÍ pueden violar vuestra privacidad como el HADOPI en Francia o ACTA hasta niveles en los que no hace falta un Juez. Mientras haya Ley con juez por delante estarás más o menos protegido a pesar de que ellos también se equivoquen de vez en cuando.

¿Te preocupa usar facebook y tienes móvil?, entonces eres un imbécil y no tienes ni puta idea de lo que estás hablando.

Yo no quiero ser anónimo, quiero ser público, cumplir la Ley y que se me escuche, porque ante todo soy un ciudadano y cuando utilizo la palabra CUIDADANO es para devolverle el valor que tiene, el cual creo que hemos perdido todos en el olvido.

Saludos,

elduende.